China tiene la segunda economía más potente, pero también la de más cuidado para su principal objetivo: Estados Unidos.
[su_spacer size=”20″]
La economía China ante EEUU y Europa
La economía de China tiene un impacto significativo tanto en Europa como en los Estados Unidos, particularmente en términos de comercio e inversión.
En términos comerciales, China es uno de los mayores socios comerciales de Europa y Estados Unidos. El país exporta una amplia gama de bienes a estas regiones, incluidos productos electrónicos, textiles y maquinaria.
Esto ha generado algunas preocupaciones sobre el déficit comercial y la posible pérdida de puestos de trabajo en las industrias manufactureras. Pero por otro lado, también proporciona productos más baratos para los consumidores e insumos para otras industrias.
[su_spacer size=”20″]
[su_spacer size=”20″]
Inversiones chinas en EEUU y Europa
China también es un inversor importante tanto en Europa como en los Estados Unidos. El país ha invertido mucho en infraestructura y proyectos inmobiliarios en Europa, y en tecnología y otras industrias en los Estados Unidos.
Esto ha llevado a un mayor crecimiento económico y creación de empleo en esas regiones, pero también ha planteado preocupaciones estratégicas y de seguridad.
Además, la “Iniciativa Belt and Road” (BRI) del gobierno chino es un proyecto de infraestructura que tiene como objetivo conectar Asia, Europa y África a través de una red de carreteras, vías férreas y puertos.
Esta iniciativa tiene el potencial de aumentar significativamente el comercio y la inversión entre China y los países de Europa y Asia Central, pero también plantea preocupaciones sobre la sostenibilidad de la deuda y las implicaciones geopolíticas.
La economía china de cara al 2023
En cuanto al caso concreto de 2023, la situación es incierta. Se espera que continúe la recuperación económica de las pandemias, pero también pueden surgir preocupaciones sobre una nueva cepa de COVID-19, el aumento de las tensiones sobre diversos temas como los derechos humanos, el comercio, la tecnología y la seguridad, la competencia geopolítica o incluso una posible crisis financiera. relaciones económicas entre China y Europa y Estados Unidos.
Es importante tener en cuenta que las relaciones económicas entre China y EE. UU. se han vuelto cada vez más complicadas en los últimos años, con tensiones derivadas de disputas comerciales y otros problemas económicos, que también pueden tener un impacto potencial en sus relaciones en 2023.
Tensiones entre China y los Estados Unidos
Si bien ambos países han mostrado interés en resolver problemas comerciales o encontrar un terreno común, no está claro si las tensiones podrían aliviarse o aumentar en el corto plazo, y es probable que sea una fuente continua de incertidumbre y volatilidad en la economía mundial.
Las tensiones entre China y Estados Unidos han aumentado en los últimos años, con una amplia gama de temas que sirven como fuente de desacuerdo. Algunas de las áreas clave de tensión incluyen:
Comercio: Una de las principales fuentes de tensión entre los dos países ha sido el comercio. Estados Unidos impuso aranceles a una amplia gama de importaciones chinas, argumentando que China se involucra en prácticas comerciales desleales, como el robo de propiedad intelectual y la manipulación de divisas. China ha respondido con sus propios aranceles sobre las importaciones estadounidenses, lo que ha llevado a una guerra comercial entre los dos países.
Tecnología: Otra área de tensión entre los dos países es la tecnología. Estados Unidos acusó a China de robar secretos comerciales y propiedad intelectual, y restringió la venta de ciertos productos de alta tecnología a empresas chinas, particularmente en el campo de la inteligencia artificial y los semiconductores. China ha respondido desarrollando su propio sector tecnológico, que se está volviendo cada vez más competitivo con los EE. UU.
Seguridad: EE. UU. también ha expresado su preocupación por el creciente poder militar de China, particularmente en el Mar de China Meridional, donde China ha estado construyendo bases militares en islas en disputa. Estados Unidos también acusó a China de violar las normas internacionales, como sus reclamos territoriales, sus actividades armadas y su historial de derechos humanos.
Derechos humanos: EE. UU. ha expresado su preocupación por el historial de derechos humanos de China, en particular con respecto al tratamiento de las minorías étnicas en Xinjiang, el Tíbet y Hong Kong. Estados Unidos ha impuesto sanciones a personas y entidades relacionadas con estos temas.
Competencia geopolítica: EE. UU. ha acusado a China de buscar extender su influencia en todo el mundo y de tratar de socavar los intereses de EE. UU. en varias regiones, como Europa, América Latina y África a través de la “Iniciativa de la Franja y la Ruta” y otras iniciativas.
Estas tensiones han llevado a una mayor presión económica y política sobre China y han llevado a un deterioro general en las relaciones entre los dos países.
La situación se ha complicado aún más por la pandemia de COVID-19, que ha llevado a un creciente sentimiento anti-chino en los Estados Unidos y otros países.
Si te interesa y quieres saber más sobre este tema, te invitamos a leer este artículo sobre las perspectivas de la economía china.
–